Reseña: Más que amigos de Ella Fields

Título: Más que amigos

Autor/a: Ella Fields

Editorial: Oz

Libro: 1/3

Género: Young adult

Páginas: 304

Precio: $360

Peggy Newland y Dash Thane han sido inseparables desde que nacieron. Ella es una chica dulce que sueña con vivir su primer amor antes de acabar el instituto; él, un chico rebelde e impulsivo que hará lo necesario para protegerla de cualquiera. Sin embargo, su amistad empieza a tambalearse cuando Byron, uno de los deportistas más populares del instituto, y Peggy empiezan a salir juntos.

Pero una noche lo puede cambiar todo… Tras un beso inesperado, Dash y Peggy deberán descubrir lo que realmente sienten el uno por el otro y lo que quieren de verdad. ¿Serán capaces de arriesgar lo que tienen por convertirse en algo más que amigos?

Esta es la típica historia de adolescentes que se centra en lo que pasa en el último año de la escuela, en este caso en el Instituto Magnolia Cove que es una escuela para niños ricos.

Peggy tiene 17 años y ha decidido que antes de terminar el instituto quiere encontrar el amor. Jamás ha tenido novio, y mucho menos ha besado a alguien, así que cuando aparece Byron en su vida quiere probar lo que se siente… 

Dash es el mejor amigo de Peggy, se conocen desde siempre ya que sus madres habían sido las mejores amigas en la escuela y hasta habían hecho un pacto para casarse con hombres millonarios sin que les importe el amor (voy a empezar a enumerar todos los problemas que he tenido con la trama para que entiendan mi puntuación final, así que esta parte es mi problema número 1, porque sí, así como leen es como lo planearon: dijeron que sólo se fijarían en la billetera de alguien para casarse y tener una vida acomodada para siempre), pero luego cuando la mamá de Peggy decide dejar a su marido millonario, la madre de Dash se enoja muchísimo, deja de hablarle y termina con su amistad.

Tras la separación, Peggy y su madre se mudan a una casa más modesta, pero su padre sigue pagando la escuela por lo que le es posible seguir asistiendo al Magnolia Cove y no separarse de Dash y de sus amigos de siempre.

A pesar de vivir en lugares distintos, Dash siempre se ha preocupado por Peggy, la busca y la lleva del colegio a su casa todos los días y pasa muchísimo tiempo en la habitación de Peggy (no le gusta estar mucho tiempo en su casa porque la relación con sus padres no es muy buena, o mejor dicho es bastante mala).

De acuerdo, ahora vamos a la parte del drama… Dash es el típico chico lindo de la escuela, el popular, el chico sexy, el que siempre está drogado y se acuesta con quien quiere (este es mi problema número 2) pero claro, Peggy jamás ha tenido novio y es una inexperta en el tema, así que cuando empieza a conocer a Byron y se da cuenta de su inexperiencia termina arreglando con Dash para que le enseñe a besar y todo lo que necesite saber sobre “las otras bases”. Total, ¿qué puede pasar? Son amigos de toda la vida, y nadie mejor que él que tiene tanta experiencia en el asunto para enseñarle.

Obviamente acá comienzan todos los problemas, porque Dash empieza a notar que sus sentimientos hacia Peggy no son tan fraternales, pero ella está comenzando una relación con Byron entonces todo se empieza a torcer…

”-Te quiero. -Su cara opacó la confesión, pero yo seguía estupefacta-. Más de lo que debería querer un amigo. La clase de amor que te atrapa y del que intentas escapar por todos los medios, pero es inútil.”

¿Por qué no me gustó la trama? Bueno, no quiero hacer spoilers, pero a pesar de que este libro es el típico cliché de los amigos que se terminan dando cuenta que siempre estuvieron enamorados (he leído muchos y siempre me han gustado), creo que la autora no supo como llevar esta relación. Me pareció sumamente tóxica. Él totalmente obsesionado con ella, siempre atrás, siempre metiéndose donde no lo llaman, siempre haciendo cosas a sus espaldas para que nadie se acerque a “su” Peggy como si fuera su dueño y tuviera todo el derecho del mundo a controlar su vida.

Ella aceptando, normalizando y perdonándolo siempre. Callándose cuando debería ponerlo en su lugar por meterse en su vida y en su relación. Normalizando que golpee a su novio por celos o que se meta en todos los planes de pareja sin siquiera consultarle.

“Si hubiera sabido hasta qué punto podía arruinarme la vida el amor, nunca lo habría buscado.”

Después tenemos a los personajes secundarios, las más importantes son las mejores amigas de Peggy (cada una tiene su historia y se desarrollan en el segundo y tercer libro de la trilogía). Ellas son Willa y Daphne y las historias románticas de ambas son bastante dramáticas y tampoco me gustó como fueron llevadas.

El problema número 3 que he tenido con la trama es que, como típicos adolescentes, los chicos vivían de fiesta en fiesta… pero ¿es necesario que en todas tenga que haber drogas y personas teniendo sexo en cada parte de la casa? No sé si ahora que soy más grande ya no disfruto con esas cosas, pero no me parece que esté bien dar ese mensaje en un libro juvenil. Pareciera que dijera: dróguense, tengan sexo con cualquiera, compitan con otras mujeres por quien tuvo el mejor sexo con tal chico, sean infieles, dejen que las usen y acéptenlo con la mejor sonrisa, porque eso es lo que son, unas put*s que ya se han acostado con varios hombres y está bien que las usen y las descarten con facilidad. ¡NO! Ya estoy harta de ese mensaje machista. Los hombres que se han acostado con varias chicas siempre son los mejores, los más divertidos, los más experimentados y las mujeres sólo son unas put*s. En serio, ya estamos en el Siglo XXI, dejemos el machismo de lado y dejemos de dar ese mensaje.

En fin, creo que hubiera disfrutado esta historia si hubiera sido más sana. No me gusta que se normalice el tipo de cosas que sucede en este libro. La verdad que toda la primera parte fue entretenida, me reí bastante con algunas situaciones y pensé que iba a ser un libro que me iba a encantar. Pero lamentablemente me decepcionó y a pesar de que he visto muchísimas reseñas con 5 estrellitas y muy buenos comentarios, yo no puedo recomendar un libro donde se normalizan ese tipo de situaciones. Aún así estoy totalmente dispuesta a leer otro libro de la autora, pero espero que esta vez deje un poco el machismo de lado...